El Parque del Alamillo, en Sevilla, es una zona verde en la que disfrutar de tu tiempo de ocio al aire libre con infinidad de posibilidades. Recorre el parque en tren, practica piragüismo en alguno de sus lagos, pasea con tu perro... ¡No tendrás tiempo de aburrirte!
De todos los parques en Sevilla, el Parque del Alamillo es uno de los más verdes de la ciudad hispalense. De 120 hectáreas y situado al final del cauce del río Guadalquivir, se inauguró en 1993 al norte de la Isla de la Cartuja.
Cuenta con algunos lagos y varias especies de aves y árboles, entre los que destacan los sauces, los madroños y la zona de naranjales. También hay diversos monumentos en el centro del parque, como el Monumento al Maestro o una estatua de Don Quijote.
El Parque del Alamillo tiene infinidad de posibilidades. Tomarte algo en un bar en las zonas de restauración, celebrar un cumpleaños rodeado de naturaleza, practicar esquí acuático o piragüismo en alguno de sus lagos, jugar con los más pequeños de la casa en la zona de juegos infantiles, enseñarle trucos a tu perro en la zona de adiestramiento canino, recorrer el parque en un pequeño tren… Como ves, hay opciones para todas y todos y nunca tendrás tiempo de aburrirte.
Además, durante la época estival se celebran los Veranillos del Alamillo. El programa está plagado de actividades para toda la familia, entre las que destacan conciertos, cine al aire libre, recitales o talleres. También puedes disfrutar de la Noche de San Juan en el Parque del Alamillo.
En definitiva, el Parque del Alamillo es mucho más que un parque: es una zona de encuentro en la que todo el mundo es bienvenido.
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