Con Ruta del Vino de la Sierra de Cádiz podrás descubrir los mejores vinos de Arcos de la Frontera y Prado del Rey. En Arcos de la Frontera se elaboran vinos tintos que se engloban en la denominación de vinos
Si te apasiona el mundo del vino, sabemos que te encantará esta Ruta del Vino de la Sierra de Cádiz. En Arcos de la Frontera se elaboran vinos tintos que se engloban en la denominación de vinos “Tierra de Cádiz”. Dentro de esta denominación también están los vinos blancos de mesa de la Sierra de Cádiz, procedentes de los viñedos de Arcos. Algunos ejemplos son el Tierra Blanca de Bodegas Páez Morilla y los vinos de Prado del Rey.
Arcos de la Frontera cuenta con bodegas que crían y etiquetan los vinos tintos Regantío Viejo (Bodegas Regantío Viejo), Viña Lucía de La Vicaría (Bodegas Páez Morilla) y Taberner y Barbazul de Huerta de Albalá. Lo mismo ocurre con los vinos de Bodegas Rivero, en Prado del Rey, herederos de aquel mítico Pajarete que triunfó en Europa a principios del XIX. Por aquel entonces, los vinos traídos desde la Sierra de Cádiz eran muy apreciados en las mesas más afamadas de Francia. El Pajarete de aquellos tiempos era un vino dulce de características muy parecidas a lo que hoy es un Oporto. Hoy en día, la bodega hace vinos tintos y blancos y se puede encontrar este vino dulce natural: el mosto Pajarete.
Itinerario
Arcos de la Frontera
Puerta de entrada de la Ruta de los Pueblos Blancos, Arcos es probablemente uno de los pueblos más bellos de España, declarado monumento histórico-artístico. Encaramado en una peña, goza de unas vistas excelentes de ganaderías de caballos, toros de lidia, huertas de naranjos, almendros, vid y olivos. Lo podrás ver desde el conocido como balcón de Arcos, en la plaza del Cabildo. Este municipio no podía faltar en la Ruta del Vino de la Sierra.
Puedes sacarle partido a tu visita a este encantador pueblo con las visitas guiadas organizadas por la Oficina de Turismo. Por ejemplo, una específica para conocer sus maravillosos patios de inspiración andaluza y árabe. Destacan como atractivo turístico su Semana Santa, declarada de Interés Turístico Nacional; y una fiesta, la Navidad, donde todo el pueblo se transforma en un Belén Viviente, de Interés Turístico de Andalucía.
Entre las ofertas que Arcos depara al visitante, amén de descubrir su conjunto monumental, podríamos citar la de practicar actividades náuticas en el lago de Arcos y el vuelo libre en ala delta o parapente, dadas sus excepcionales condiciones para ello.
Maridando vinos
La bodega Compañía General de Vinos de Cádiz, en Arcos de la Frontera, recupera los antiguos vinos de Regantío Viejo y está creando nuevas propuestas, como Fine Tempo. En la finca Regantío se puede disfrutar de los vinos los fines de semana. Propone maridarlos con un buen plato de chorizo y lomo en manteca, huevos fritos ecológicos y una buena “fritá” de papas. Está disponible solo para los almuerzos, y hay que llamar para reservar. Para que los padres puedan almorzar más tranquilos, la finca cuenta con un original servicio de guardería de niños que pueden estar fuera jugando al cargo de unos animadores. Finca Regantío Viejo. Carretera de Alberite-Arcos CA-6105, km. 8. Teléfono de reserva: 956108306 Una bodega que no podía dejar de ser nombrada en la Ruta del Vino de la Sierra.
La Bodega Regantío Viejo de Arcos propone dos rutas de sabores. Una de ellas consiste en la visita a la bodega con degustación de vinos y un posterior almuerzo.
Prado del Rey
En este municipio, perteneciente a la Ruta de los Pueblos Blancos, la huella humana se remonta al Paleolítico. Sin embargo, su más emblemático legado histórico es la ciudad romana de Iptuci, situada al sur de la localidad. Allí se llegó a la acuñación propia de monedas, de cuya importancia dan fe las citas de Plinio y otros historiadores romanos. Actualmente no se puede visitar.
Las Bodegas Rivero se ofrecen a organizar tu visita y buscar el alojamiento. También te informarán sobre ruta de tapas, comidas y otras visitas por la zona, como la de una salina en plena Sierra de Grazalema. No podían faltar en la Ruta del Vino de la Sierra de Cádiz.
Salinas de Hortales
Situada en la cumbre de la “Cabeza de Hortales”, fueron los fenicios quienes iniciaron la explotación de sus salinas, alcanzando todo su esplendor en la época romana.
Surgidas de un manantial de agua salada, son una de las últimas salinas de interior que se mantienen en funcionamiento en Andalucía. Su actividad está documentada desde el siglo XIV aunque, según los estudiosos del tema, las Salinas de Hortales fueron ya trabajadas por los fenicios. Estas tuvieron su máximo esplendor en época romana, aunque siguieron dando sal en la Edad Media. Hoy en día siguen siendo explotadas por una familia serrana en su cuarta generación. Actualmente, los propietarios enseñan, previa solicitud, toda la salina. Por supuesto, su principal interés es la venta de “flor de sal”, muy apreciada en los mercados europeos por su pureza. Esta especialización permite la rentabilidad de la salina y, por tanto, el mantenimiento de esta actividad tradicional. Teléfono Oficina de Turismo: 956 724 436
Como ves, la Ruta del Vino de la Sierra de Cádiz es mucho más que vino.