El Convento de Santo Domingo se ubica en un lugar conocido popularmente como “del Boquete” por haber sido el sitio donde los asaltantes anglo-holandeses habían arrojado la imagen de la Virgen del Rosario en 1596. El retablo mayor es una destacada pieza genovesa de mármoles de colores fechada en 1691. Este es considerado uno de los ejemplos más sobresalientes de los retablos italianos del barroco en España.
El Convento de Santo Domingo se ubica en un lugar conocido popularmente como “del Boquete” por haber sido el sitio donde los asaltantes anglo-holandeses habían arrojado la imagen de la Virgen del Rosario en 1596. La construcción del actual recinto conventual dio comienzo en 1645, con el apoyo económico del comerciante vasco Domingo de Munárriz.
Las dependencias del Convento de Santo Domingo se centran en torno a un claustro barroco, fechado hacia 1660. Está organizado en cuatro crujías de tres cuerpos cada una.
La iglesia, santuario de la Virgen del Rosario, patrona de Cádiz, concluyó en el año 1666. Tuvo que reconstruirse parcialmente tras el incendio de 1936.
Tiene planta de cruz latina. Consta de tres naves, la mayor de ellas dividida en cinco tramos por columnas toscanas, entre las que se abren arcos de medio punto sobre los que van tribunas en forma de balcones. El retablo mayor es una destacada pieza genovesa de mármoles de colores fechada en 1691. Este es considerado uno de los ejemplos más sobresalientes de los retablos italianos del barroco en España.