El Lola, en Tarifa, te ofrece buena comida, buena música y un no sé qué que te obliga a volver. Un bar de tapas desenfadado y divertido en el que descubrir la comida de siempre como nunca. Clásicos como la ensaladilla o el salmorejo van de la mano de sashimis, ceviche y tartar en una carta fresca y apetecible.
Caminando por el casco antiguo de Tarifa, desde el castillo hacia el miramar, escuchamos los primeros acordes flamencos que salen de El Lola. En este bar de tapas fresco y divertido descubrirás la comida de siempre ¡como nunca!
Clásicos como la ensaladilla, los aliños o el salmorejo van de la mano de ceviches, sashimis y tartares. En esta carta, la sinceridad de las buenas materias primas se une al placer de una cocina a la que le gusta dar bien de comer. ¡Y eso se nota!
El ritmo de El Lola hace de su terraza una de las más apetecibles. Sin saber si esa noche te van a cantar algo, entre manteles de lunares se pueden degustar platos frescos y ligeros. Por otro lado, también puedes apostar por alguno más contundente, como la tortilla ibérica o una buena carne de retinto a la parrilla.
No podemos olvidar el atún rojo de almadraba. Este es un imprescindible en El Lola, donde podemos catarlo en tartar, tataki, a la plancha o con mantequilla y crema de erizo o con un laqueado estilo asiático. ¡Te chuparás los dedos!
La carta de vinos es corta y atractiva, aunque no olvida los vinos generosos de Jerez ni las veraniegas sangrías, tanto blanca como de tinto.
Es mejor así; pocas opciones, pero todas apetitosas. Esto, unido a cómo te recibe todo el equipo, hace que El Lola siempre sea una buena opción.