El Teatro Romano de Málaga es uno de los símbolos romanos de la ciudad. Dispone de un moderno centro de interpretación ubicado a su lado en el que, por medio de las nuevas tecnologías, se puede conocer la vida y las costumbres de la época. También se ha recuperado su uso primigenio ofreciendo representaciones teatrales y espectáculos en su interior.
El Teatro Romano de Málaga es uno de los símbolos romanos de la ciudad. Se encuentra situado en la ladera oeste del cerro de la Alcazaba. Edificado en época de Augusto, se utilizó hasta el siglo III.
Es de construcción mixta, aprovechando parte de la ladera pero también se levanta una terraza artificial para apoyar las gradas. En dimensiones y características es muy similar a otros teatros de la Bética, muy cercanas al modelo clásico propuesto por Vitrubio. El centro de interpretación que está decorado en su exterior por fragmentos de la Lex Flavia Malacitana contiene piezas originales recuperadas en las excavaciones.
El Teatro fue descubierto en 1951 mientras se hacían unas obras para construir un espacio con jardines. En un principio, los restos aparecidos se identificaron con parte de las puertas de la muralla. Poco después se vio que en realidad se trataba del Aditus Maximus de un edificio teatral de época romana. Dicho edificio se continuaba por debajo del edificio moderno de Archivos, Bibliotecas y Museos, conocido como Casa de la Cultura.
En la actualidad, el Teatro Romano de Málaga está declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento Artístico. En el planeamiento urbanístico vigente está catalogado con el grado A, protección integral, por el Plan General de Ordenación Urbana de Málaga.