Este verano hemos tenido la oportunidad vivir una experiencia única de compras. Cuando uno va a un centro comercial, piensa en encontrar multitud de tiendas y restaurantes donde pasar el rato y realizar compras. O donde encontrar un cine o una bolera para divertirse con amigos o familiares. Visitar Bahía Sur es algo más.
Bahía Sur se encuentra ubicado en el corazón del Parque Natural Bahía de Cádiz. Todo lo que allí sucede es mágico y diferente. Su paseo marítimo se ha convertido en un punto de encuentro para pequeños y mayores. En él se realizan actividades enfocadas al cuidado y respeto de la naturaleza.
Su programa de verano incluye todos los jueves sesiones gratuitas de Ashtanga Yoga. En un marco incomparable, al aire libre y con la puesta de sol sobre la ciudad de Cádiz como escenario. Los viernes se han reservado para actuaciones de magia, samba brasileña, espectáculos de danza aérea o de flamenco o malabares.
Los sábados, los peques han aprendido valores medioambientales en su ‘Campamento de Naturaleza’. Talleres de la Ballena Bahía (¡el esqueleto real de una cría de ballena que recuperó el centro comercial!), plantas aromáticas, gymkanas deportivas o la práctica de piragüismo en las aguas de la Bahía.
Sin saber qué nos íbamos a encontrar al visitar Bahía Sur, nuestro plan resultó completo. Llegamos por la mañana para realizar algunas compras, ya que todavía quedaban gangas veraniegas que aprovechar. A la hora de comer, hicimos una parada para reponer fuerzas en uno de sus restaurantes con terraza. Nuestra elección fue El Fogón de Mariana. Ofrecen cocina mediterránea con producto local y de temporada. No te puedes perder sus carnes de La Janda y otras recetas propias como el salmorejo, las ‘papas aliñás’ o cualquiera de sus chacinas.
Por la tarde nos apetecía disfrutar del entorno, así que nos acercamos a Recepción para que nos aconsejaran sobre alguno de sus planes al aire libre. Cuál fue nuestra sorpresa cuando nos cedieron unos prismáticos para observar las aves que habitan el parque. Además, nos dieron dos bicicletas para darnos un paseo y disfrutar del entorno. Nos recomendaron la Ruta de ‘la Sal y los Molinos Mareales’. Descubrimos, además de playas infinitas, un sendero que conecta Cádiz con San Fernando rodeado de patrimonio histórico natural y arquitectónico.
Después de nuestra expedición, decidimos volver al centro comercial y disfrutamos de una puesta de sol con música en directo. Todos los días del verano han dedicado un tema musical a un motivo que aporte valor al medio natural que nos rodea.
Sin duda, un espacio comercial diferente que nos ofreció una nueva manera de mirar los centros comerciales como puntos de encuentro que van más allá de las compras. Visitar Bahía Sur significa sentir la naturaleza.